Cardos de la Abuela

El cardo, utilizado obligatoriamente en ollas y pucheros, también lo consumimos en algunos guisos como el que ahora presentamos. Aunque es de temporada, durante todo el año lo podemos encontrar congelado, bien en el comercio o preparándolo en casa y, realmente, mantiene una muy buena calidad. Verdura muy rica en fibra, fundamental en la dieta mediterránea.

En una cazuela sofreímos el magro cortado muy pequeño, añadimos la panceta fresca, los cardos cortados, la cebolla y los ajos picados y un poco de sal. Cuando esté bien dorado, añadimos un poco de harina, el vino blanco y el agua. Iremos añadiendo agua hasta que los cardos estén tiernos. Una vez los cardos tiernos, añadimos el huevo batido y un poco de perejil picado, rectificamos de sal y servimos. La salsa no debe quedar muy espesa.